Estos fueron los
jugadores provenientes de Hungría que ayudaron a consolidar la naciente
liga colombiana de fútbol.
El coqueteo de la Hungría de entreguerras con la Alemania nazi le traería graves consecuencias, cuando quiso desligarse ya era demasiado tarde y terminada la Segunda Guerra Mundial los soviéticos se quedarían en el territorio imponiendo su régimen. Algunos jugadores de fútbol de amplia trayectoria fueron los primeros en salir de su patria como fórmula salvavidas.
Se agruparon bajo el nombre del Hungarian con el beneplácito y amparo de la FIFA, exhibiendo su buen juego por toda Europa. Con Kubala como máxima figura arrasaban a cuanto equipo se les paraba en frente. Le ganaron al Liverpool y al seleccionado español entre los triunfos más importantes.
Este es el equipo de refugiados del HUNGARIAN antes de venir a Suramérica, aún con Kubala primero a la izquierda. Foto tomada de as.com
La noticia de los mercenarios magiares llegó a oídos de don Alfonso Senior, importante figura dirigencial del naciente balompié cafetero, que en representación de Millonarios los contrataría para una gira a finales de 1950. Cuatro partidos fijos y otros cuatro opcionales por quinientos mil dólares, sería el negocio que traería por primera vez a un equipo de fútbol europeo a territorio colombiano.
Después de no conseguir ningún triunfo en tierras cafeteras corroborando el altísimo nivel del que sería llamado El Dorado, el equipo húngaro viaja rumbo al sur para continuar la gira con partidos en Ecuador y Bolivia.
El HUNGARIAN en tierras Suramericanas: De pie de izquierda a derecha: Monsider, Sarossy III, Gabriel Rakosky, Meszáros, Ladislao Fussesy, Alejandro Torok, Hanke. Abajo en el mismo orden: Uram, Szoke, Samu, Imre Danko, Di Lorenzo, Julio Zsengeller, Nyers II. Foto tomada de blog de Alovelez1962
Estando en Quito los directivos del Junior de Barranquilla contactan a Imre Danko, joven figura que había reemplazado a Kubala en la gira por el fichaje de este último por el Barza. Danko llega al Tiburón por pedido expreso de su técnico, el austríaco Friederich Donnenfield. Copete Danko, como le dirían toda la vida en Barranquilla donde se estableció, exige que también sean contratados László Szoke, Ferenc Nyers, Sarossy III y Béla Majtényi.
En la vecina Santa Marta los dirigentes Eduardo Dávila Riascos y José Eduardo Gnecco aprovecharon el desorden y contrataron también parte de la desbandada húngara. Ya tenían en mente salir con un equipo para el torneo de 1951, pero les faltaba materia prima. Con éstos refuerzos más otros jugadores europeos vería la luz el Deportivo Samarios.
La figura del naciente equipo, que a la vez haría las veces de director técnico, sería Gyula (Julio) Zsengellér, exquisito delantero ambidiestro de físico privilegiado, conocido como el Profesor por su conocimiento del latin y del francés que venía precedido de una gran fama. Había sido subcampeón del mundial del 38 y segundo goleador del torneo detrás de Leonidas de Brasil. En su país jugando para el Újpest durante once años anotó 387 goles siendo el tercer máximo artillero de todos los tiempos en Hungría.
Zsengellér cortesía de Wikipedia.
Junto con el Profesor llegaron también del Hungarian: Joseph Kajml, Ernest Sabeditch, Joseph Samu y Sandor Alejandro Torok, todos ellos húngaros. Milos Dragolovich de Yugoslavia. Laszlo Fusessy de Grosetto de Italia. Gerog Hanke y Alejandro Negrescu de Rumania. Ernest Sabbadith, Joseph Samu y Rudolf Stritich de Austria.
Capítulo aparte merece el extraordinario mediocampista húngaro Georgy (Jorge) Marik, de gran visión de juego y técnicamente exquisito; pasaría luego al Santafe y se radicaría definitivamente en México.
De la tierra integrarían también a Samarios: Rubén Arango (de la dinastía de los Arango de Santa Marta), Orlando Granados, Antonio Carrasquilla, Jaime De La Espriella, Nelson el maestro Pérez y Rubén Rocha.
De ese primer año de Samarios, lleno de extranjeros igual que el resto de equipos colombianos, es la famosa goleada del 29 de Julio, día de la ciudad de Santa Marta por ser el de su patrona, cuando enfrentó al equipo de Universidad de Bogotá y le metió doce goles a uno, récord actual en Colombia, con seis anotaciones de Zsengellér.
Samarios 1951. De pie de izquierda a derecha: Gerro Hankel, Georgy Marik, Joseph Kajml, Julio Zsengeller, Ernest Sabeditch, Joseph Samu, Alipio Ortiz, Víctor Lanao, Rubén Rocha. Abajo en el mismo orden: Alejandro Negrescu, Alejandro Torok, Orlando Granados, Nelson Pérez, Ladislao Laslo Fussesy, Rómulo Barrios. Foto tomada de blog alovelez1962.
Al final del torneo Deportivo Samarios termina en el puesto catorce entre dieciocho equipos, y bajo ese nombre verá sólo un torneo más, antes de cambiar su nombre por pedido expreso de la gobernación del departamento.
La escuela húngara del Deportivo Samarios, aportaría los primeros ladrillos para construir un estilo de juego lleno de coraje y buen pie, que a la postre será potenciada por otros jugadores dando como fruto el juego único del Unión Magdalena, el Ciclón Bananero.